martes, 25 de mayo de 2010

Hilos de Oro

Nuestras almas están unidas con hilos de oro,
quizá hayamos vivido mil vidas antes que esta y nos hayamos encontrado en cada una de ellas..

Quiza..

jueves, 20 de mayo de 2010




SOLO SONRIE

No tienes que hacer nada: sólo sonríe.

Tu risa es el idioma con el que le hablo a las estrellas.
 
Montserrat H. Castillo

miércoles, 19 de mayo de 2010



TODAS LAS MAÑANAS DEL MUNDO

Cualquier mañana despertaré, sigilosa y circundante
elevandome por los placeres de tu voz..

Cualquier mañana deslizaré mi índice desnudando tu cabello,
haciendo circulos infinitos y abismos eternos..

Cualquier mañana podria pensarte
y llegando el medio día haber tenido ya toda una historia,
en mundos alternos y lejanos..

Cualquier mañana podria decirte donde estoy para que no vengas a buscarme
y al mismo tiempo .. cualquier mañana esperaría eternamente la hora de encontrarte.

Cualquier mañana de cualquier día despertaré preguntando por ti..

Montserrat H. Castillo


LLUEVE LUZ
En los atardeceres temporales del espíritu
cuando nuestras almas abrazan en silencio nuestros mundos profundos y luminosos,
tu nombre llueve en mi piel
y se esparce como una cadena de flores.

Sólo tú suspendes mi voz en tus suspiros
y en nuestro suave tiempo imaginario
aunque no cerca estemos, te siento cada día rozándome invisible
y sutilmente impalpable.

Mi camino está lleno de tu nombre!!

Espero el día en que pueda abrazar cada noche con mi cuerpo de luna
el templo de blanco de tu alma tranquila.

Montserrat H. Castillo

PIENSO EN TI

Pienso en ti, tú lo sabes
lo sabemos, amor
lo sentimos, nos soñamos

Nos hablamos, amor
tu ahí, yo a tu lado
nos amamos

Tu sonríes, me sonríes
sonreímos, amor
nos disfrutamos

Tu me adoras, nos amamos
tu me amas, amor
nos adoramos

Nos miramos, amor
tu me piensas, lo sé
pienso en ti, tú lo sabes

Nos pensamos, amor
lo sabemos, lo saben
de tu amor, de mi amor
de lo nuestro,
de estar enamoradas

Montserrat H. Castillo
TREINTA DESPERTARES

Sólo treinta despertares con tu ausencia, y luego
tu carne convertida en mil demonios
provocando mis instintos primitivos
extrayendo con tosca delicadeza a mi verdadera yo
que se escuda detrás de el ser social adaptado.
Sólo treinta madrugadas de levantar la persiana, correr las cortinas
y no encontrarte entre la luz
recordé que tus locuras invadan mi cama, mi cocina, mi piso..

Las dos jugábamos a creer en las medias naranjas
y los destinos
(porque son muchos, claro)
siempre supieron que ibas a llegar


Sólo treinta insomnios maldecidos que acaparan totalitarios
las horas que programé con anticipación y alevosía
a descansar y conseguir algo de cordura
un poco, aunque sea
que me permita decirle NO a tu presencia
que incluye, irremediablemente, tu partida...


Montserrat H. Castillo



SIMPLES DESEOS


Hoy quisiera sentir tus dedos escribiéndome historias en el pelo
y quisiera tus besos en mi espalda
acurrucarte en mis brazos,
y que me dijeras las más grandes verdades
o las más grandes mentiras,
que me dijeras por ejemplo
que soy la mujer más linda del mundo,
que me quieres mucho y cosas así
tan sencillas
tan repetidas,
que me delinearas el rostro
y me vieras a los ojos
como si tu vida entera dependiera de que los míos sonrieran.

Cosas quiero,
como que andes mi cuerpo
y detrás de cada una de tus caricias en mi piel
construyeras un camino arbolado y soleado,
que seas la primera lluvia del invierno
dejándote caer despacio en mi pecho
y luego en mi alma.

Cosas quiero,
como una gran ola de ternura
deshaciéndome,
un caracol susurrándome al oído lo maravilloso de la vida,
o una docena de peces en la boca
algo de eso..


Frágil y desnuda
como una flor a punto de entregarse a la primera luz de la mañana
así eres tu en mis brazos,
con esa sonrisa entre tierna y salvaje que me enloquece,
con esa mirada en la que puedo caer y caer..


Así eres tu,
mi pasión hecha mujer,
mi dulce anhelo,
mi delirio constante,
mi abismo de locuras,
mi persistente alegría.



ASI ERES TU.
 
Montserrat H. Castillo


TRES CARICIAS

Tres caricias me dio tu mirada,
las tres distintas y las tres iguales;
una de viento con tu aroma,
besos de miel y suavidad de pluma..

Otra de fruta fresca,
puestas de sol,
y gotas de lluvia en los cristales.

Y la tercera de ternura felina,
de salvajes caprichos y ardientes deseos

Las tres idénticas y diferentes,
tan profundas las tres, tan transparentes,
y al mismo tiempo tan devastadoras;
entrelazadas de esperanza,
como alcanzando el cielo con un dedo
para perderlo al cabo de unas de horas.

Montserrat H. Castillo

Seguidores